Alguien se ha entretenido en limpiar la luz roja del semáforo de modo que cuando se enciende se ve la forma de un corazón.
Da para varias interpretaciones, claro: Frena el amor. El corazón es rojo pasión. La vida se interrumpe cuando el corazón se pone en rojo. No todos los semáforos son iguales. Dime ante qué te paras y te diré quién eres.
Lo que sea. Pero no me digáis que no tiene guasa la cosa. Me imagino a alguien allí, por la noche seguramente, encaramándose para alcabzar su objetivo... Poesía urbana.
8 comentarios:
¡Qué bonita historia debe guardar ese corazón!
Puede que alguien lo marcara porque sabe que otro alguien lo mirará mientras espera. Nos volvemos raros cuando llega esa estación llamada amor, tan breve, tan perturbadora. No sé.
"Dime ante qué te paras y te diré quién eres."
Yo me suelo parar en los escaparates de las zapaterías y las relojerías.
yo me para ante las pasteleria que tienen expuestas tartas de manzana .
Pues yo debiera pararme más. El impulso me impide vivir muchas cosas.
Las pequeñas intevenciones artísticas en la ciudad me dejan siempre con una sonrisa por dentro; o con una reflexión facilitada.
Esta es pero que muy buena. Dentro de no mucho pondré en mi cuaderno una hecha en mi barrio (del tipo reflexión) de los mismos autores que pusieron la foto enorme de la prostituta vieja que colgué hace mucho. A lo mejor desde estos blogs, entre otras cosas, dejamos rastro del rastro que otros dejaron.
(Me habéis hecho pensar y me he dado cuenta de que aunque ando mucho casi nunca me paro, salvo para las "postales": paisajes urbanos, aperturas, espacios, cielos. Como si les hiciera un foto que solo queda en mi memoria. También miro mucho a las personas con las que me cruzo, pero sin dejar de andar; y yo diría que lo hago impertinentemente: en Nueva York no seguiría vivo ni dos días, me dicen).
eeeeei!!!! estàs en tot, eh? els carrers estan tan plens de coses que a simple vista no es veuen...
Los latidos del corazón de un semáforo son mucho mas lentos, pero no por ello menos importantes.
Resulta que, al parecer, no es ése el único semáforo al que le han añadido la forma de un corazón en la luz roja. Según me comentó en Berlín Josan Hatero, él había visto algún otro en una ciudad que no recordaba, pero que no se trataba de Barcelona. En fin, si se tratase de un movimiento, habrá que estar atentos a las consignas. O a lo que sea.
avui de camí a la feina, m'he parat en aquest semàfor..que m'encanta. les senyals apareixen quan obrim els ulls per trobar-les
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